Walter Vuoto: presento a inversor para construcción de hotel en Ushuaia denunciado por lavado de dinero, estafa y asociación ilícita.

Alberto Di Carlo, empresario acusado de asociación ilícita y estafas, es clave en el hotel tres estrellas promovido por Walter Vuoto en Ushuaia.

El intendente Walter Vuoto celebró, junto a Secretaria de Turismo Viviana manfredotti,  recientemente el inicio de un proyecto hotelero de cuatro estrellas con capacidad para 200 camas, destacándolo como un impulso clave para el turismo local. Sin embargo, detrás del anuncio surge la polémica al conocerse que uno de los principales inversores del proyecto es Alberto Di Carlo, un pastor y empresario con un historial marcado por denuncias de estafa, conflictos legales y acusaciones de asociación ilícita. (Ver anuncio)

Trayectoria manchada por escándalos

Di Carlo, conocido por liderar la Iglesia Bautista Cristo Redentor y fundar la empresa «Aldic Emprendimientos Inmobiliarios S.R.L.», ganó notoriedad con el desarrollo de proyectos habitacionales bajo la marca «Tierra de Sueños». Aunque inicialmente prometían ser accesibles y transformadores, muchos de estos proyectos dejaron a cientos de familias desamparadas debido a incumplimientos, falta de servicios básicos y problemas judiciales. Los barrios Tierra de Sueños 1, 2 y 3 en Rosario se convirtieron en auténticas "Tierra de Pesadillas", debido a problemas graves con los servicios básicos, lo que llevó a los vecinos a denunciar al empresario ante el municipio local, que a su vez inició acciones legales contra Di Carlo.

Entre las denuncias más graves contra Di Carlo figura la realizada por su propio hermano, Jorge Di Carlo, quien lo acusó de asociación ilícita, estafa y lavado de dinero, complicando aún más la ya polémica trayectoria del empresario.

Uno de los casos más resonantes fue la Torre Shopping Condo Hotel en Rosario, iniciada en 2012. Lo que comenzó como una propuesta de departamentos de lujo terminó convertido en un hotel administrado por la cadena Accor, dejando a los compradores originales sin escrituras, con contratos modificados unilateralmente y una obra sin habilitación comercial. Además, en la ciudad de Roldán, rompió los códigos de construcción duplicando la altura permitida en un edificio que originalmente estaba destinado a departamentos de alquiler. Luego, sin consentimiento de los propietarios, creó un fideicomiso para convertir el edificio en un hotel, generando conflictos legales con los afectados.

De Rosario a Ushuaia: nuevas oportunidades, mismas dudas

A pesar de su historial, Di Carlo ha encontrado en Ushuaia una nueva oportunidad para reinsertarse como inversor, esta vez de la mano del intendente Walter Vuoto, que no solo le abre las puertas del municipio, como si fuera de su propiedad, sino que lo anuncia con bombos y platillos, incluido el portal de la municipalidad. En octubre del año pasado, fue presentado como principal inversor y elemento del equipo detrás del Hotel Ibis, un desarrollo que busca fortalecer la oferta turística de la capital fueguina, según el intendente y una de sus funcionarias, la secretaria de Turismo Viviana Manfredotti. Quienes en conjunto tambien son los impulsores del impuesto al turista. 

Mientras en Rosario los ecos de sus escándalos aún resuenan en los tribunales, en Ushuaia, Di Carlo parece gozar del respaldo político de Vuoto y de La Cámpora, quienes lo han posicionado como un actor clave en las futuras inversiones de la ciudad.

Preocupación entre los vecinos y opositores

El vínculo entre Vuoto y el controvertido empresario ha despertado inquietud,  generado enojos entre los residentes y sectores de la oposición, que cuestionan la falta de transparencia en el anuncio y advierten sobre los antecedentes de Di Carlo. “No podemos permitir que un inversor con un historial tan cuestionable maneje un proyecto para nuestra ciudad”, expresó un referente local.

Futuro incierto para el turismo y la confianza pública

El caso deja en evidencia la necesidad de un mayor control sobre los proyectos que involucran fondos públicos o privados en Ushuaia. Aunque el hotel podría representar un avance en términos de infraestructura turística, el pasado de su inversor principal plantea serias dudas sobre el futuro del proyecto y su impacto en la comunidad.

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