Provincias que más empleos perdieron y su capacidad de recuperación: Un análisis de las expectativas

Las provincias argentinas que más empleos perdieron entre 2023 y 2024, y cuáles tienen mayor potencial de recuperación.

Entre octubre de 2023 y mayo de 2024, la pérdida de empleos formales afectó duramente a varias provincias argentinas. Sin embargo, la llegada de inversiones en sectores estratégicos como la minería, el petróleo y la energía, ofrece un panorama de recuperación en algunas regiones.

En los últimos meses, Argentina ha experimentado una pérdida significativa de empleos formales, afectando especialmente al sector privado. Según un informe de la consultora Econviews, basado en datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), entre octubre de 2023 y mayo de 2024 se perdieron 142.000 puestos de trabajo, siendo la construcción y la industria manufacturera los sectores más afectados.

La construcción, un sector tradicionalmente procíclico, fue el más afectado, con una pérdida de 73.000 empleos formales, producto de la parálisis en la obra pública y la recesión económica. La industria manufacturera, por su parte, vio desaparecer 25.000 puestos de trabajo debido a la apreciación cambiaria y la caída del consumo.

Por otro lado, sectores como el agro, la minería y el petróleo muestran una tendencia opuesta, generando empleo neto a pesar de la crisis. El agro, en particular, ha sumado 11.000 nuevos asalariados desde octubre de 2023, mientras que la minería y el petróleo continúan atrayendo inversiones que impulsan la creación de empleo.

A nivel provincial, las pérdidas de empleo formal privado han sido desiguales. Las provincias más afectadas fueron Formosa (-11,4%), Tierra del Fuego (-10,9%), La Rioja (-9,1%) y Santa Cruz (-7,8%). Otras provincias como Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba y CABA también experimentaron caídas, aunque en menor medida.

Sin embargo, algunas jurisdicciones muestran un potencial de recuperación notable. Neuquén y Salta, por ejemplo, han registrado un crecimiento en la cantidad de puestos de trabajo, con un incremento del 0,2% y 1,6% respectivamente. Estas provincias, impulsadas por inversiones en Vaca Muerta y la minería, han visto un aumento significativo en el empleo en los últimos cinco años.

Catamarca también destaca por su crecimiento en empleo privado durante el último lustro (+18,4%) gracias a la llegada de inversiones mineras, aunque desde octubre ha perdido un 5,3% de sus trabajadores asalariados.

El economista Nadin Argañaraz explicó que el ajuste fiscal que están llevando a cabo tanto el Gobierno Nacional como las provincias, especialmente en la obra pública, tiene un impacto directo en el empleo. Formosa, por ejemplo, experimentó una caída interanual del 18,1% en el trabajo asalariado en mayo.

De cara al futuro, el potencial de recuperación dependerá en gran medida de la evolución de nuevas inversiones en energía, petróleo, infraestructura y minería. Según Natacha Izquierdo, economista de Abeceb, Neuquén, Mendoza y el noroeste argentino tienen la mayor capacidad de recuperación debido a estas inversiones. Río Negro, con proyectos como la planta de Gas Natural Licuado (GNL) de YPF y Petronas, también tiene un potencial significativo de crecimiento.

A medida que se desarrollan estas inversiones, se espera que no solo aumente el empleo en estos sectores específicos, sino que también haya un efecto dominó en la construcción y los servicios, traccionando la creación de empleo en otras áreas. No obstante, la recuperación del empleo en el sector público y en el comercio dependerá de la evolución del crédito y el consumo, lo que augura una recuperación lenta y gradual.